Volviendo a París, aprovecho para mostrar la exposición de Hergé que se hacía en el Gran Palais. Hergé está por toda mi casa, los cómics en general, ya que mi padre es un fanático de todo ese mundo por lo que no ha dudado en inculcarnos un poco de esa cultura dentro de lo que ha podido.
Después de esta introducción, no es de extrañar que gastase unas cuantas horitas del viaje en ver esta exposición que resultó ser enorme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario